Agüero 2502 El nombre completo es Macedonio, café del lector. Y está en los jardines aledaños a la Biblioteca Nacional, en la llamada Plaza del Lector que fue inaugurada en 1998. La plaza ocupa el predio que antes era pura maleza, en la esquina de Agüero y Av. Las Heras. Apenas entrás por Las Heras, te topás con una rayuela grabada en sus baldosas, y ahí nomás te largás a soñar. El café está rodeado de árboles. No es un bar notable, pero tiene encanto. Hace algunos años, la primera vez que visité el café, un mago pasaba mesa por mesa y asombraba con sus trucos. Fue la única vez que vi a menos de un metro de distancia como alguien doblaba una cucharita de plata con su mente. Esta vez volví con una amiga, y si bien no hubo truco, hubo magia. Es un bar querible, a pesar de que no tiene una fisonomía particularmente bella. Lo mejor está afuera. En el contexto de plantas y luces. En la silueta de la biblioteca como telón de fondo. En las exposiciones temporales que se...